viernes, agosto 31, 2007
¿por qué andar caminos sin asfaltar?
Era como si movieras una cajita y algo sonara en su interior, como si fuera una obra de los antiguos olmecas sonajeros y por dentro le corrieran bolitas de barro que le hacían sonar... era como si no necesariamente fueran bolitas que hubiera colocado algún artesano antiguo, pero se las hubiera comido en sus sueños más profundos, más obscuros....
Tal vez no es que algo estuviera necesariamente roto o fuera de lugar y provocara ruidos... puede ser que sólo hubiera caído una borrasca en un minuto y hubiera tirado todas mis flores al piso....
lunes, agosto 27, 2007
Me llamo Rojo
Orhan Pamuk
1998
Reflejos
Si me ves bien, te darás cuenta de que no soy sólo un charco.
Tampoco soy un árbol ni una hoja que de tanto mojarse ha caído al fondo, al fondo de mí. Si me ves de cerca, si pegas tu nariz a mi agua, notarás como vibro por tu cercanía, por sentir tu calor que tan ajeno me es en estos momentos de lluvia y frío.
Soy el reflejo de un árbol, pero no un árbol, soy tu reflejo, pero no tú. Soy un instante en las manos de Dios que ha dejado que el agua se riegue para que nunca más pueda ser recogida. Soy ese que en el momento en el que lees éstas líneas que, inútilmente tratan de explicar lo que soy, ha dejado de existir.
sábado, agosto 18, 2007
Tejiendo
Tócame con tus manos callosas, teje mis hilos, moldea mis fibras, repasa tus manos ásperas por mis contornos y acomoda sus salientes, compara mi color a contra luz y dime bajito cómo vamos, si voy saliendo bien...
Deshaz mis nudos cuando veas que me desvío, acaricia la seda de mi piel, acomódame y créame a tu antojo y luego vislumbra mi vida lejos de ti, o quédate conmigo si lleno tus ojos, si regreso tu caricia lo suficientemente suave, como si tejieras con hilos del cielo, como si yo, con mis hilos, pudiera envolverte entre nubes...
miércoles, agosto 15, 2007
Sagrado

martes, agosto 07, 2007
Querido Juan Fernando:
Tenía los pies cubiertos de espuma. Pensaba en lo maravilloso que sería poder tener un libro entre las manos y que éste no se humedeciera. Sólo eso me faltaba Juan Fernando de Atocha: un libro.
Estaba pensando en escribirte ésta carta y tuve que memorizarla. Quería platicarte de la señorita Vicario que perdió la virginidad antes del matrimonio y que fue devuelta a sus padres por ese pequeño detalle... quería reirme contigo de la falta de complementariedad de los sexos, de la falta de acento de unos y otros y también de una frase que escuché en el foro porturario Iberoamericano (al que asistí en API), decía que "la inclusión es el fruto del conocimiento" y al oirla pensé en ti y anoté una JF al margen de la hoja azul, y pensé que la inclusión entre sexos, ese notar qué te falta y cómo completarlo, en realidad es tan complicado como desmenuzar con exactitud lo que nosotros queremos...
También quería comentarte que eso que decías en tus letras acerca de "retomar los valores femeninos" es en verdad complicado cuando una misma se rechaza y quiere ser fuerte, y vencedora, cuando quiere ser como un hombre, para vivir en un mundo de hombres...
La espuma seguía flotando entre mis piernas, subía hasta mis caderas y el sol acariciaba mi espalda. Podía ver a lo lejos algunas formaciones de piedras y seguía tratando de memorizar la carta como cuando fui a Xalapa y trataba de memorizar tu rostro para tenerlo aún después de que haberme ido, el sonido de las olas ayudaba a traer tu cara de santo a mi memoria...
No tengo idea de que sea etología, debo confesarte también que al leer la expresión "en sentido lato", pensé que decías en sentido lechoso, aunque después caí en cuenta que eso más bien sería lacto....
Estaba en la playa de los muñecos Juan Fernando, memorizando en presente pero escribiendo en pasado, en la playa donde dicen que un meteorito volteó esa piedra grande que no ves, pero que tengo en mi panorama visual, aquí donde se pueden ver pulpos y peces, donde se ven caracoles, cangrejos ermitaños y erizos de mar, donde sientes el paraíso con las puntas de los dedos.... el paraíso entre la espuma de mar.
Querido Juan Fernando, espero que estés muy bien. Ya es casi tiempo de regresar a la escuela. Para cuando recibas ésto ya habremos hecho nuestra presentación y tal vez los equipos.
Te mando un abrazo mojado de playa, de sal de mar,
Camembert
