Volcán

Lo primero fue sentir el tropel de tierra sobre mi piel.
Me pusiste contra la pared y me besaste con las ganas amarradas por los años
Se zafaron de ti sin refrenarse. Tus manos bajo mis caderas,
Subiendo hasta mis senos mientras la tierra caía y nos enterraba.

Y mientras quedábamos bajo el alud
La luz venía de nosotros y no había oscuridad.
"Ojalá fueras de verdad", te dije mientras volvía a vivir.
"Soy de verdad muchacha", me respondiste sonriendo.

Y luego subimos la montaña que había caído alrededor
Como lava desde el centro, tomados de la mano en erupción
Quemando recuerdos, aventando cenizas
Dejando en el camino la piel de quienes éramos.

Quedamos en el cielo suspendidos brevemente
Entre promesas de éxtasis, entre los brazos de Eros
Abrazados y entrelazados en saliva y piel
Brevemente antes de volver a caer.

Y pusimos pies sobre la montaña,
La lava escocía nuestra nueva piel
El miedo resurgió de entre nuestra nueva tierra
Y dejamos que la ceniza del pasado nos nublara otra vez.

El calor nos sobrepasó y nuestra piel descalza empezó a sufrir
Corrimos muchacho, sin entender que la luz era nuestra
Sin entender que no necesitábamos huir
Y nos soltamos de la mano, regresando a la oscuridad.