Desalmado (por no decir Pirata)

Todavía no llegaba a comprender el por qué de sus actos La había agarrado a besos en pleno baile, tocándole primero por debajo de la cintura, como si por error las manos se le hubieran ido a la parte baja de la espalda. Nadie se había tragado su mentira, pero no eso no importaba ahora que ella le contestaba los besos. -Salimos la próxima semana- dijo frotándo su cuerpo contra el cuerpo de ella, que no contestó, solo asintió y siguió bailando. No la ha llamado y aún teme no que no le llame y se haya olvidado para siempre de los besos, más bien a que le llame y jugar a la menitra de engañar a su novia.